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La segunda vida de los cojines viejos: 6 formas eficaces y creativas de utilizarlos en casa y en el campo
En todos los hogares se acumulan con el tiempo un montón de cosas que dejan de ser aptas para un uso básico. Entre ellas y viejos cojines, de plumón y con relleno sintético. Aunque parecería que qué hacer con ellos, en realidad hay muchas maneras creativas y prácticas para dar a estas cosas útiles una segunda vida, utilizándolos para resolver una variedad de tareas domésticas.
Qué hacer con los cojines viejos: uso práctico del material de relleno
Las almohadas viejas son, de hecho, una gran reserva de relleno que puede aprovecharse. Es importante desinfectar el relleno (sobre todo el de plumón y pluma) antes de reutilizarlo, por ejemplo, calentándolo en un horno a una temperatura baja de 100 c durante 15 minutos o tratándolo con un espray antibacteriano.
El relleno de cojines, ya sea de syntepon, hollofiber o plumas, puede utilizarse para rellenar peluches caseros, muñecas o cojines de pensamiento decorativos.
Los cojines desechados son un excelente material aislante del calor. Su estructura celular retiene eficazmente el calor, por lo que pueden utilizarse para aislar las tuberías de agua o alcantarillado de las heladas en invierno. Basta con envolver una sección de la tubería en zonas sin calefacción, como sótanos o cobertizos, y asegurarla con cinta o cuerda.
Los cojines pueden servir de embalaje y amortiguación fiable al trasladar o transportar objetos frágiles como vajillas, cristales, espejos o cuadros, protegiéndolos de golpes y vibraciones.
Cojines viejos para soluciones creativas y de mobiliario
Los cojines viejos pueden convertirse fácilmente en nuevos objetos funcionales para el interior:
Un cojín viejo puede transformarse rápidamente en una cómoda cama o un mullido lecho para tu perro o gato. Basta con cubrirlo con un nuevo tejido denso que se pueda quitar fácilmente para lavarlo.
Si cubres el cojín con una tela decorativa densa (por ejemplo, pana para muebles o polipiel), puedes crear un original y suave puf para sentarse o un reposapiés en el salón o en la casa de campo. Sobre todo si coses varios cojines juntos para crear un elemento grande.
Utilizar cojines viejos en la casa de verano y el jardín
El relleno de pluma (pluma y plumón) es un valioso abono orgánico rico en nitrógeno. La pluma tiene un alto contenido en nitrógeno, pero se descompone lentamente, lo que garantiza una nutrición duradera del suelo – el efecto es similar al de las virutas de cuerno. se puede añadir al cavar la tierra tanto para el jardín como para el huerto. Se recomienda picar las plumas y mezclarlas bien con la tierra para acelerar la descomposición.
Como puedes ver, a pesar de lo aparentemente innecesario, los cojines viejos pueden adaptarse con éxito para resolver muchas tareas económicas y creativas. sé creativo, y las cosas viejas seguirán sirviéndote fielmente.
